jueves, 13 de enero de 2011

Anónimos, el retorno

Cuando se acercan las fiestas patronales del presente año 2011, resulta que algún tema que creía cerrado desde el año pasado ha vuelto a la palestra. Ya se sabe, cuando el dedo del sabio señala la luna, el necio se queda mirando al dedo, que decía R. Tagore. Aunque tengo dudas si no es de nuevo el principio de Hanlon en acción.
Ayer recogí una nueva versión del anónimo que alguien me envió el año pasado recién terminadas la fiestas del Santo. Digo una nueva versión porque si alguno lo ha leído se dará cuenta por comparación con anterior (que pueden ver aquí) que algo ha cambiado. Si no lo han leído, no merece la pena, francamente. Pero no puedo resistir la tentación de hacer un "fiskeo" del texto (comentario conciso e intertextualizado).
Antes observar algunos cambios.
1.- Ya no es un individuo, ahora son varios los que hacen suyo el anónimo, ya se sabe, anónimos unidos jamás serán vencidos...
2.- Han eliminado alguna frases poco afortunadas aunque el tono xenófobo ("qué se habrá creído el forastero este...") sigue ahí.
Pero vamos con el texto, me salto lo insustancial y voy a algunos detalles solamente, no quiero aburrir. El texto original del anónimo va entre comillas y mi comentario en letra negrita.
"...un grupo de personas de esta población nos disponemos a redactar este escrito con la única intención de darle una explicación, que para las próximas si Dios lo quiere le ayude a ocupar el puesto para el que ha venido, sin necesidad de entrar en terrenos que no le corresponden."
La intención se presume buena, pero echo en falta la explicación a la que aluden. En realidad no explican nada, sólo descalifican sin haberse molestado en revisar si dije lo que piensan que dije. Y ¿cuáles son los terrenos que me corresponden? ¿Me los van a explicar ustedes con el Derecho Canónico, el Manual de Pastoral y su amplio conocimiento de las labores del párroco detenidamente? ¿Me pintarán unas "líneas rojas" que no puedo traspasar por mi bien? No sé, no sé.

"...hemos de decirle que menos ética y saber estar demostró usted de todo."

Como por ejemplo conocimientos culinarios y de astronomía, ¿no? A ver, mandar anónimos xenófobos, falaces y amenazadores sí que es un verdadero ejercicio de ética y saber estar. Es que no hay nada más ético que tirar la piedra desde detrás de la tapia y salir corriendo. O venir de noche a dejar el papelito subrepticiamente. Toda una lección de estilo, ética, saber estar y "fair play". Vamos, que me descerrajo de la risa.

"Ni aún llevando aquí veinte años, se podría considerar lógico que pusiera falta a las tradiciones de un pueblo..."

Dos cosas: ¿cuántos años hace falta para poder hablar de las tradiciones del santo en algún sentido? Y digo hablar porque es mentira, sí, mentira, que pusiera falta a tradición alguna. Es más, me gustan como son, aunque se pueda siempre mejorar algún detalle como es normal.

"Dice usted que los tiempos han cambiado y en eso estamos de acuerdo, pues en otra época y por menos, en relación con las fiestas de S. Antonio Abad otro sacerdote se tuvo que marchar".

Toma lección de ética y saber estar, han quitado lo de retirar el saludo de la primera versión, pero las amenazas ahí siguen para mostrar la catadura moral del personal, lamentable.

"Ni que decir tiene que el importe de las tiradas... (...) se dedica a entregar desde los balcones alimentos a aquellas personas que los quieran recoger, incluídas quienes los puedan necesitar, en memoria de la vida del Santo."

Pues de eso se trata o se trataba, de ver como se respeta mejor la memoria del vida del Santo. San Antonio Abad repartió sus bienes ¿"a quienes los quisieron recoger, incluidos los necesitados"? ¿O fue más bien preferiblemente a los necesitados? ¿Qué sabemos al respecto?

(Sé que es inutil pero lo voy a intentar de nuevo: no se trata de cambiar nada, sino de buscar la forma de garantizar que "los que lo necesitan" reciban ayuda con ocasión de la fiesta del Santo ya que eso es lo que a él le agrada; y eso no pasa solo, hay que ver cómo se puede hacer para que hoy ese aspecto no quede en segundo plano. Que se quiere hacer esto, fantástico. Que no se quiere, pues peor para nosotros, a S. Antonio Abad no creo que le de igual desde dónde nos contempla, de eso estoy seguro).

Luego nuestros amables anónimos hacen un fantástico ejercicio de poner en relación el tocino con la velocidad, o el culo con las témporas, como prefieran. Valencia y las Fallas cuya relación con San Antonio Abad y Trigueros no acabo de entender a no ser que quieran incluir en las fiestas de Trigueros una fallera mayor o algo así. La feria de agosto de Valverde que no sé si tiene alguna relación con la Iglesia o algún santo, ellos la encuentran así que debe tenerla de alguna extraña y misteriosa manera.
Luego mencionan a Beas y vuelvo a partirme de la risa, dicen: "nos consta que en el tiempo que permaneció en esta localidad, no le fue posible poner fin a la Romería de Ntra. Sra. de los Clarines con el gasto que ello conlleva"... curioso, dan por supuesto que: yo he intentado en algún momento hacer eso cosa que es una simple falacia más de quien no se atreve a dar la cara y que es eso, de alguna retorcida manera, lo que insinué respecto a las tiradas, lo que es otra falacia, vamos otra mentira de quien o quienes ni se enteraron ni se enteran de nada.
Con lo de San Juan ya volvemos al ejercicio de "qué tendrá que ver el tocino con la velocidad" en grado total. Pero no voy a insistir.
Los dos últimos párrafos van dedicados a recomendaciones de lo que otros (no ellos, ellos están a salvo) deben hacer para que las cosas vayan mejor en la fiesta. A lo mejor hasta tienen razón en algo de lo que dicen en todo lo que escriben en éste y en el dirigido al ayuntamiento, pero esa cobarde forma de comportarse los descalifica desde el primer punto y seguido.

Todavía me asalta una última duda... ¿tan complicado le resultaba al autor original del anónimo o al grupo que sea, venir a hablar cara a cara conmigo y explicarme su desacuerdo o su molestia? Las personas que tenemos que hablar mucho en público tendemos a equivocarnos con cierta frecuencia y a no explicarnos siempre todo lo bien que desearíamos. A mí me resulta de gran ayuda que me hagan ver cuándo no me explico bien o me paso de frenada. Unas veces me sirve para corregir la forma de explicarme, otras para aprender sobre la condición humana. En todo caso todavía no he llegado a comerme a nadie que discrepara de mi opinión, por más que me guste defender mi forma de ver las cosas. Los anónimos, las amenazas, el recurso a la difamación o el tono calumnioso no sirven más que para empedrar el camino del infierno. Sí, del infierno.
Y yo firmo lo que digo y lo que escribo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tus comentarios, se agradecerá la correcta ortografía y la opinión constructiva.