Nuestra Residencia de Mayores se ha ido consolidando como un centro de atención integral al mayor que se esfuerza por mantener los más altos estándares de calidad y cuidado. Es un esfuerzo cotidiano en el que intentamos resolver todo obstáculo y dificultad que va surgiendo.
A pesar de las dificultades económicas vividas en los últimos años y en el presente, hemos ido mejorando las instalaciones para estar a la altura del mejor servicio que podamos prestar y estamos abiertos a las mejoras que se vayan viendo necesarias.
Recientemente se creó el circuito saludable en el jardín de entrada que ha sido un gran aporte a la salud y la convivencia de los mayores que conviven en la residencia y está abierto a quien quiera pasar algún día con nosotros.
Se ha mejorado la distribución de los espacios de convivencia en el interior, redistribuido los lugares de trabajo, renovado la maquinaria de lavandería, se han instalado placas solares para el agua caliente y renovado los depósitos así como el tratamiento antical por uno más moderno y eficiente.
Igualmente se ha renovado la pintura interior con nuevos y agradables colores para dar más alegría al espacio, tarea que sigue en la actualidad en las habitaciones. Se ha renovado la uniformidad de los/as trabajadores/as. Y cambiado el sistema de indicaciones de los espacios por una cartelería nueva y más moderna.
También nos acogimos a un plan de renovación del sistema de luces que ha supuesto el cambio por luces "led" de menor consumo en gran parte de las instalaciones.
El sistema de atención sanitaria también ha cambiado, realizando el médico del centro de salud visitas periódicas para facilitar dicha atención y seguimiento de la salud de nuestros residentes.
Estamos abiertos al trabajo voluntario de quienes quieren dar parte de su tiempo al servicio de los mayores.
Además hemos puesto en marcha una web propia en pruebas, aquí: Residencia de Mayores "San Antonio Abad". Donde ofrecemos toda la información necesaria a quien quiera tener un primer contacto desde casa con nosotros.
Y hay un espacio en Facebook también.
Este blog pretende ser un medio de comunicación de la Parroquia, de todos los que la formamos. Quiere ser un lugar de encuentro también en este mundo virtual que nos permita intercambiar información y opinión.
sábado, 28 de febrero de 2015
jueves, 26 de febrero de 2015
El cura signo de contradicción
Si predica más de diez minutos... ¡no acaba nunca!
Si predica menos de diez minutos... ¡no se prepara las homilías!
Si habla de la contemplación de Dios... ¡está en las nubes!
Si habla de los problemas del pueblo... ¡no tiene experiencia de Dios!
Si aborda los problemas sociales... ¡gira a la izquierda!
Si aborda los problemas morales... ¡es de derechas!
Si va a trabajar a la fábrica... ¡es que no tiene nada que hacer!
Si se queda en la parroquia... ¡está cortado del mundo!
Si casa y bautiza a todos... ¡vende los sacramentos como en rebajas!
Si se vuelve más exigente... ¡quiere una Iglesia de «puros»!
Si se queda en la casa parroquial... ¡no ve a nadie!
Si hace visitas... ¡no está nunca en casa!
Si tiene éxito con los niños... ¡tiene una religión de crío!
Si no quiere a los niños... ¡es un desagradable!
Si visita a los enfermos... ¡tiene tiempo para perder-lo y pasa al margen de los problemas de su tiempo!
Si no visita a enfermos y a ancianos... ¡es un despreocupado por los que sufren!
Si hace obras en la iglesia... ¡tira el dinero por la ventana!
Si no hace nada... ¡es un abandonado!
Si colabora con el consejo parroquial... ¡se deja llevar como un borrego!
Si no tiene consejo parroquial... ¡es demasiado individualista!
Si sonríe fácilmente... ¡se muestra demasiado familiar!
Si, distraído o preocupado, no ha visto a alguien... ¡es un distante!
Si es joven... ¡no tiene experiencia!
Si es mayor... ¡debería jubilarse!
Y así sucesivamente...
Si predica menos de diez minutos... ¡no se prepara las homilías!
Si habla de la contemplación de Dios... ¡está en las nubes!
Si habla de los problemas del pueblo... ¡no tiene experiencia de Dios!
Si aborda los problemas sociales... ¡gira a la izquierda!
Si aborda los problemas morales... ¡es de derechas!
Si va a trabajar a la fábrica... ¡es que no tiene nada que hacer!
Si se queda en la parroquia... ¡está cortado del mundo!
Si casa y bautiza a todos... ¡vende los sacramentos como en rebajas!
Si se vuelve más exigente... ¡quiere una Iglesia de «puros»!
Si se queda en la casa parroquial... ¡no ve a nadie!
Si hace visitas... ¡no está nunca en casa!
Si tiene éxito con los niños... ¡tiene una religión de crío!
Si no quiere a los niños... ¡es un desagradable!
Si visita a los enfermos... ¡tiene tiempo para perder-lo y pasa al margen de los problemas de su tiempo!
Si no visita a enfermos y a ancianos... ¡es un despreocupado por los que sufren!
Si hace obras en la iglesia... ¡tira el dinero por la ventana!
Si no hace nada... ¡es un abandonado!
Si colabora con el consejo parroquial... ¡se deja llevar como un borrego!
Si no tiene consejo parroquial... ¡es demasiado individualista!
Si sonríe fácilmente... ¡se muestra demasiado familiar!
Si, distraído o preocupado, no ha visto a alguien... ¡es un distante!
Si es joven... ¡no tiene experiencia!
Si es mayor... ¡debería jubilarse!
Y así sucesivamente...
Suscribirse a:
Entradas (Atom)