Este fin de semana se celebra el "Día del Seminario" en la Iglesia de España. Un día en que además de tomar conciencia de la vocación sacerdotal, la vocación al presbiterio, al servicio que hay en la Iglesia, recordamos la necesidad de colaborar con la oración y la ayuda a la institución que forma a quienes se sienten llamados y escogen responder.
Es curioso que de todo lo que el vídeo promocional dice los medios se hayan fijado sólo en lo anecdótico y lo resalten de la forma más burda. Dice más de la estulticia de los medios incapaces de mirar más allá que de lo que el vídeo intenta transmitir. Vivimos tiempos difíciles y ya sabemos que necio no descansa.
Recemos por el seminario y los seminaristas, recemos por las vocaciones sacerdotales y, cómo no, las religiosas. Demos gracias a Dios por aquellos que pone en nuestra vida y nos ayudan a seguir en el camino, a mirar más allá del dedo de quién nos señala el horizonte que el Padre nos tiene reservado en su amor incontestable.